CONTINÚO RECOPILANDO las posturas o situaciones favoritas en las que les llegaban las ideas a los escritores o filósofos célebres: Nietzsche sostenía que las ideas le venían caminando; Sankara decía que caminando se le disipaban; Flaubert aconsejaba pensar sentado; Cioran en cambio proponía pensar tumbado en la cama; Gide era de la opinión de que las ideas llegan en cualquier momento o postura, por lo que se debe llevar un cuaderno de notas todo el día para que no se escape nada; Virginia Woolf pensaba de pie; Truman Capote en posición horizontal; los antiguos griegos por su parte recomendaban pensar con el cuerpo recostado; mientras que Descartes y Heidegger coincidían en la misma manera: sostenían que después de dormir toda la noche, ya despiertos, lo ideal era demorar la salida de la cama, momento en el que les venían las mejores ideas.